26/08/2015

Teniente coronel Andrés Dapena (San Sebastián 1956-2015)

De aspecto despistado, amable, querido por todos, pausado y exhaustivo en sus explicaciones. El teniente coronel Andrés Dapena (San Sebastián 1956) era un ser humano extraordinario. Como buen donostiarra, era seguidor de la Real Sociedad, y amante de la montaña y del mar, mar que un aciago 21 de agosto le robó la vida, mientras nadaba en una playa de su último amor: Almería.

Viajero empedernido, casi aventurero, había visitado innumerables países, muchos de ellos lejanos y exóticos; el último viaje que hizo, este verano, con su mujer e hijos, fue a Sri Lanka. ¡Cuántas horas hemos pasado sus compañeros y amigos escuchando increíbles anécdotas de sus viajes…!

Quizás fuera ese carácter aventurero el que le empujó a aceptar el desafío, hace casi diez años, de formar parte del selecto grupo de profesionales que fundaron la Unidad Militar de Emergencias. El reto no era fácil, pero su temple y empuje como Jefe de la Sección de Asuntos Económicos (S.A.E.) hicieron que ésta sea, a día de hoy, una de las Secciones Económicas más potentes del Ministerio de Defensa.

Siempre estaba dispuesto a ser el primero en dar un paso al frente, como demuestra que fuera el primer oficial de intendencia que, voluntariamente, solo y sin ningún apoyo, viajara a Djibouti a mediados de los noventa, como oficial de enlace, en la entonces incipiente misión de lucha contra la piratería en el Cuerno de África.

Ya no podrá volver a disfrutar de sus paseos en bicicleta, ni de la historia de nuestra España, que tanto le gustaba, y de la cual ya forma parte.

Su calidad humana deja un hueco enorme, y difícil de llenar. Te echaremos mucho de menos.

Andrés Dapena, descansa en paz. Tus compañeros de la UME nunca te olvidaremos.

Torrejón, agosto de 2015.