16/11/2023
La Unidad Militar de Emergencias (UME) ha superado este jueves su segunda reclasificación como equipo de búsqueda y rescate urbano (USAR, por sus siglas en inglés), de tipo medio, al cumplir con las guías del Sistema de Clasificación Externa del Grupo Asesor Internacional de Operaciones de Búsqueda y Rescate (INSARAG). De esta manera, la Unidad puede continuar garantizando su capacidad en emergencias tanto nacionales como internacionales, como ya ha demostrado en los terremotos de Haití (2010), Nepal (2015), Ecuador (2016), México (2017), Turquía (2023) y Marruecos (2023).
Durante la reclasificación en la Base Aérea de Torrejón, los evaluadores han comprobado el proceso del equipo para desplegarse en el extranjero ante un supuesto terremoto y las actuaciones sobre el terreno; entre ellas, la localización de víctimas mediante búsqueda cinológica y técnica, corte y perforación, vuelos con drones y la estabilización y extracción de víctimas.
Asimismo, los efectivos también han tenido que organizar el Centro de Recepción y Coordinación de equipos (RDC, por sus siglas en inglés) en el caso de que la UME fuera el primer grupo internacional en llegar al país afectado en una emergencia real, como sucedió en la operación de Marruecos en septiembre. El papel del RDC consiste en recibir a los equipos USAR que acceden a la zona de la catástrofe, coordinarlos en apoyo a las autoridades de la nación anfitriona y proporcionarles instrucciones e información actualizada sobre la situación en zona, vital para su despliegue hasta que se establezca el Equipo de las Naciones Unidas para Evaluación y Coordinación en Casos de Desastre (UNDAC).
Un grupo formado por 10 evaluadores internacionales ha hecho un seguimiento al equipo USAR del Primer Batallón de Intervención en Emergencias (BIEM I), compuesto por 47 militares y cuatro perros, que han contado con el apoyo de otras unidades de la UME. Dichos evaluadores proceden de: Alemania, Estados Unidos, Francia, Hungría, los Países Bajos, el Reino Unido, Suiza y Ucrania.
Durante la clausura, celebrada en el auditorio General Montiano, el jefe de evaluadores, Joseph Matthew Kaleda, ha destacado la preparación del equipo, como se ha demostrado en las últimas intervenciones internacionales. Por su parte, Annika Coll, jefa del equipo de Emergencia y Respuesta Inmediata de la Comunidad de Madrid (ERICAM), que ha ejercido como mentora, ha señalado el paralelismo entre su unidad y la UME y la evolución de ambas desde 2011.
Por último, Christophe Vivek Debray, representante de INSARAG, ha reconocido la importancia de estas reclasificaciones para tener “una visión y una misión común para actuar coordinados en los países afectados”. Posteriormente, Vivek ha hecho entrega del diploma acreditativo de la reclasificación al general de división José Manuel Cuesta Casquero, segundo jefe de la UME, quien ha agradecido el apoyo de todos aquellos que desde dentro y fuera de la Unidad han hecho posible este nuevo reto.
La UME en el sistema de INSARAG
Uno de los cometidos de INSARAG, organismo que depende de la ONU, es evaluar y certificar unos mínimos estándares de actuación en operaciones de búsqueda y rescate en zonas urbanas, con el objetivo de homogeneizar la labor de los diferentes equipos internacionales que intervienen en una emergencia en el extranjero. De esta manera, se ayuda al país afectado en la recepción y gestión de la ayuda internacional.
Tras la participación de la UME en las labores de rescate del terremoto de Haití (2010), esta Unidad procedió a obtener la certificación de INSARAG como equipo USAR Medio (MUSAR). Este tipo de equipo está capacitado para actuar en una zona de trabajo de forma continuada (24 horas) con una autosuficiencia mínima de siete días, además de poseer las capacidades de mando y control, sanidad, logística, búsqueda y rescate. Finalmente en 2011, y junto al ERICAM, la Unidad pasó el Proceso de Certificación Externa.
Cinco años después, en 2016, se reclasificó para mantener dicha capacidad. Debido a la pandemia de la covid-19, la siguiente reclasificación no se pudo realizar en 2021, retrasándola hasta el año en curso.